Bienvenidos al blog de la Unidad de Rehabilitación de Salud Mental de Granada

Esperamos que este blog sea una herramienta útil para todos los compañeros y usuarios de la URA de Granada y para el colectivo de salud mental en general.

jueves, 20 de noviembre de 2014

La terapia con Mindfulness

Todos los viernes a última hora hago Mindfulness con Juan Francisco y otros pacientes de la URSM.
El Mindfulness me deja relajado y tranquilo pero me cuesta dejar pasar los pensamientos como me ha dicho Juan Francisco un puñado y medio de veces.
Un día estando haciendo Mindfulness me vinieron muchos  pensamientos negativos seguidos y no pude dejarlos pasar. Entonces me encontré mal y me puse a llorar. Luego se me pasó; aunque ese día tenia ganas de irme antes de tiempo, pero no me fui y seguí haciendo la terapia de relajación.
En ocasiones haciendo mindfulness se me distrae la mente y me cuesta trabajo volverla a su sitio. Por todo lo demás el Mindfulness me va muy bien aunque a veces me distraiga y me entre sueño.
Mi cuerpo a veces mientras estoy haciendo esta terapia necesito moverlo, porque me encuentro raro e incomodo siempre en la misma posición. Otras veces me distrae el ruido de la calle y me cuesta trabajo concentrarme  en la dinámica de la sesión.
Hace poco que he empezado a practicar  estas terapias en casa todos los días y la verdad es que me aportan serenidad y calma, alejando los pensamientos negativos durante unos minutos. En ocasiones no puede controlarlo y me quedo dormido.


JFGR    

miércoles, 19 de noviembre de 2014

Mis días en Centro Social Canasteros


Salvo los últimos dos años, que han sido los más flojos por la muerte de mi padre, porque he cortado la relación con mi pareja o porque me han dicho que la lengua catalana es una lengua afrancesada y por la lejanía de tener a mi hermano en tierras navarras. Excepto estas cosillas; la verdad es que disfruto mucho en este centro social, hay buen ambiente y buen compañerismo. Aunque la relación con algún monitor en algún momento pasado,  no haya sido del todo buena, no guardo rencor alguno.
Me he adaptado muy bien a las actividades en las que suelo participar  con los demás compañeros. Entre ellas citaremos las siguientes: deportivas como gimnasia de mantenimiento, futbol-sala, minibasket y otras, culturales como lectura y comentarios de cuentos, dibujo y pintura y salidas por la ciudad, para ver actos culturales. El viernes estuvimos viendo un acto de música-danza en la Plaza de las Pasiegas. Para no perder detalle de la puesta en escena nos situamos en primera fila.  El espectáculo corrió a cargo de un grupo de expresión corporal formado por mujeres que lo hicieron muy bien. A mí se me caían las lágrimas de contemplar este gran espectáculo, pero al mismo tiempo me enorgullecí de poder disfrutar este momento.

Como muestra de colaboración con el centro a veces saco la basura y la deposito en sus contenedores correspondientes, la de residuos plásticos en el amarillo, la orgánica con la orgánica, el vidrio en el contenedor verde, el papel y cartón al azul y las pilas en contenedor para pilas, toda una muestra  ecológica y de respeto al medio ambiente. También hacemos talleres de costura y cocina impartidos por una monitora que es un sol de persona. Ahora estamos aprendiendo a preparar recetas sencillas de nuestra rica y variada gastronomía  andaluza y española. Se hacen cosas muy interesantes y platos muy suculentos que luego  compartimos.
Algunas tardes me llego a la panadería que tenemos junto a Canasteros y practico las habilidades sociales con la panadera, que es muy simpática y trabajadora y además le echo una mano a sacar las cajas vacías. Ella me trata con mucho cariño y yo con mucho respeto.

Saludos especiales para Estrella Montoza, Maribel Montesinos y Ana Isabel Labrat, que no me olvido de ellas, porque fueron unas  grandes profesionales y además nos trataron con mucho tesón y cariño.
Me gustaría también hablar del restaurante Casa Braulio, donde muchos de los usuarios de Canasteros vamos a comer. Se sitúa en la calle Martínez de la Rosa, entre Plaza gran Capitán y la Plaza Albert Einstein. Es un restaurante con fachada moderna, pero por dentro tiene sabor señorial y clásico, donde todo el que va allí  se siente relajado y a gusto.
El personal es muy selecto y amable, aparte de atento y cariñoso. A la cabeza está mi amigo Braulio Ruíz Gómez que es una gran persona y un gran profesional. Sirve unos platos exquisitos cuya comida es baja en calorías y muy saludable.
Suelo ir andando tanto si estoy en la URSM como en el Centro Social Canasteros. De esta manera me ayuda a movilizarme, orientarme por las calles de Granada y por tanto  perder peso.   

JMML


viernes, 7 de noviembre de 2014

Mis Rutas con la O.J.E


La OJE que yo conocí estaba bastante descafeinada con respecto al doctrinario Frente de Juventudes. Era una especie de-Boys Scout-; pero no éramos “pijillos” como ellos, aunque si más machistas. Esto es un detalle refiriéndome al machismo que nadie o pocos conocían en pleno régimen de Franco, pero era cierto.
Las excursiones, las había como una al mes en preciosos parajes de ríos haciendo “vivac” en sus márgenes, o subiendo montes de poca envergadura.
En el verano se organizaban campamentos, en las zonas de costa o de sierra.
Tuve la oportunidad de participar en dos de ellos; uno en Cataluña y otro en Mallorca.
El de Cataluña era más animado, por lo menos eso es lo que me pareció a mi .Los hubo que ligaron con las nativas de aquel pueblo llamado Pallafox, muy cercano a la costa Brava. Los demás no nos comíamos una rosca; aunque por intentarlo no quedaba. Tanto los ligones como nosotros, nos escapábamos del campamento a poco de tocar silencio, eso le daba un toque como más aventurero.
Los compañeros de mi escuadra íbamos a una localidad que estaba en fiestas, con chicas impresionantes y donde se veía por lo general extranjeros dirigirse a la playa entre abrazos y apasionados toques y sexo por anticipado.
Nosotros volvíamos al campamento con nuestra represión inalterada que con el tiempo se trasformo en inalterable.
Una noche nos vio salir uno de los jefes del campamento y se “armo la de Cristo Dios” Fuimos juzgados por el jefe del campamento sumadísimamente y pagamos nuestra osadía haciendo guardia junto a los mástiles de las banderas. Aunque el jefe se apiadó de nosotros y duro el suplicio media hora .Lo lógico es que amaneciéramos haciendo guardia toda la noche, pero como digo apenas nos desvelamos.
Los cadetes que eran los mas creiditos, se lo montaron de lujo con unas cariñosas  catalanas que conocíamos en la playa. Eran mejor tratados porque disfrutaron de las nativas del lugar.
Al año siguiente fuimos a Mallorca. El campamento estaba situado en las bahías del norte de la isla, un paraje realmente bonito, con tupidos bosques de coníferas y campamentos de la sección femenina, chicas a las que intentamos ligarnos una noche. Pero la rectora del campamento las protegía  de nuestras perversas intenciones.
Así eran las cosas en aquellos tiempos, en que nos teníamos que conformar casi todos con “Ale-Manitas”. El viaje fue de un sufrimiento sin cuento, había mucha marejada y ningún hábito a navegar. Estuve toda la noche malísimo dando arcadas, tirado por la borda, hasta que en la niebla avistamos la isla deseada.


J.L.C