Bienvenidos al blog de la Unidad de Rehabilitación de Salud Mental de Granada

Esperamos que este blog sea una herramienta útil para todos los compañeros y usuarios de la URA de Granada y para el colectivo de salud mental en general.

viernes, 15 de febrero de 2013

QUENTAR-PANTANO DE QUENTAR:UNA RUTA DE ENSUEÑO



          Quedada en Quéntar, 9 de la mañana, de un día soleado pero frío de otoño, ¿por qué no?, 1 de noviembre, día de todos los Santos y festivo. Nos proponemos pasar un día de campo, donde disfrutar de todo aquello que la naturaleza nos puede dar sólo con el mero hecho de poner nuestros sentidos a su servicio. El grupo de amigos, dispuesto a dar todo para alcanzar el disfrute, charla tranquilamente antes de empezar la ruta. Ya dispuestos, se empieza a andar a un ritmo no muy rápido todavía, para calentar. Se empieza en el Hondo el Lugar, ya que ahí nos dejó el autobús, el pueblo rezuma tranquilidad, aquella que no nos da la capital. También nos invade el olor a café, ya que los tres bares están situados por la zona, no muy lejos los unos de los otros. No llevamos mucho andando y nos encontramos la plaza con un castillo que a lo largo de los años ha servido para acoger las fiestas de moros y cristianos de la localidad.

            Pasados 5 minutos, nos ponemos en el río, bajando una cuesta, y es ahí donde se ve todo el esplendor de Quéntar, su sierra, montes llenos de verde: árboles, hierba, matorrales, etc. No importa que sea verano, el verdor perdura; la umbría hace de esos montes un lugar único y especial, no se cansa el oriundo ni el visitante, muestra de su belleza.

            El paseo por el río, nos lleva 15 intensos minutos oyendo su sonido inconfundible, que sólo el paso de algún vehículo pueda empañar. A ambos lado del camino “peazos” y cortijos nos vigilan, dando fe de sus raíces agrícolas y ganaderas. ¿Quién sabe si nos encontraremos algún animal por el camino?

            Tras pasear por el río llegamos al puente el Duc, camino más intenso empieza la subida, los almendros nos cobijan, durante la media hora de caminata siguiente además de almendros podemos ver olivos. El olor a membrillo también está presente conforme se avanza, cómo no, granados y caquis, árboles de la temporada abundan por la ruta. Lo mejor cuando se ha subido durante la media hora, ya que se llega a el cortijo de Prado Montero, cortijo antiguo que perdura durante el tiempo entre árboles, y no muy lejos, por otro caminito nos encontramos la fuente del Mochuelo, fuente de agua natural con alberca incluida, en un sitio de recogimiento y especialmente preparado para el descanso y disfrute del caminante; y ahí no queda todo, un poco más arriba una cruz en una erilla, anima al creyente a rezar con las vistas de la serranía.

            Tras la parada continuamos nuestra ruta, ya queda poco para ponernos en el pantano, 15-20 minutos, por paisaje más escarpado, pero todavía hay olivares por el camino. A la mitad una cabra montés de piedra, nos da fe de que en cualquier momento nos podríamos topar con alguna manada, ¿quién sabe? No sería la primera vez.

            Antes de llegar al pantano, unos pinos de la zona nos dan la bienvenida. La llegada resulta triunfal, se observa el pantano, con mucho agua, entre montañas y barrancos, con pinares esparcidos, eso por un lado del pantano pero hacia el otro, la mirada del barranco y la altura nos hace ser prudentes a la hora de acercarnos, el vértigo invade, aunque la belleza y la curiosidad nos hace que no podamos dejar de observar con detenimiento y temor.

            Ruta concluida, buen día echado, ¿cuál será la siguiente?

P.J.F.N – Noviembre 2012

No hay comentarios:

Publicar un comentario